lunes, 26 de febrero de 2007

Nada

Ya no tengo sufrimiento, ya no tengo quien me mienta
ya no tengo a quién contarle lo que tengo en mi cabeza
ya no siento desconfianza, ya no siento más violencia
ya no siento que mi vida valga menos que tu ausencia

Ya no me importa tu destino, ya sólo quiero hayar el mio
ya no me asombra tu existencia, ya no me asombra nada

Ya no tengo que explicar, ya no tengo quién me juzgue
ya no tengo a quién pedirle una opinión sobre mi vida
ya no siento el alma ciega, ya no siento el alma muerta
ya no siento que mi vida valga menos que tu ausencia

Ya no me importa tu destino,ya sólo quiero hayar el mio
ya no me asombra tu existencia, ya no me asombra nada
Para mí ya no existes, tiempo
para mí ya no existes
Para mi ya no queda nada ... para mi ya no queda nada.

domingo, 25 de febrero de 2007

sueño extraño



Iba caminando por la riviera de un río que atravesaba una ciudad europea muy linda. Llovía,pero eso parecía no molestarme. Como para comprobar cuán mojada iba, me miré pero me vi vestida de manera peculiar : vestía zapatos bajos, una falda hasta la rodilla de color crema y un chaleco de color blanco. "Ésta fue una mala elección para un día de lluvia" pensé.La calle tampoco parecía darse cuenta que llovía : inmutable,acogía a los caminantes errantes como yo.


Al frente mío viene una mujer de abrigo largo que lleva a dos niñitas de la mano: una a la derecha, que se ve mayor con abrigo gris oscuro; al lado izquierdo,claramente,la menor,que vestía de blanco. Estas tres mujeres me sonríen y me invitan a su casa debido a que estaba desprotegida caminando claramente sin rumbo en plena lluvia.


El edificio me parecía más un edificio de oficinas que una casa, pero no dije nada,algo impidió que articulara palabra alguna. La madre me dijo que ellas vivían escondidas, que para sus hijas, pasar por la adolescencia en un lugar tan minúsculo y sofocante era atroz. Es entonces cuando la miro con extraño y luego miro a las niñas,que ya no eran niñas,sino jóvenes mujeres, de mi edad, aproximadamente.


La más pequeña me miraba de manera cómplice y una vez que entramos a la "casa" (su puerta de entrada quedaba detrás de un librero grande y pesado, bastante discreta pero extraña aquella puerta),la menor me llevó silenciosa pero rápidamente a su habitación y cerró la puerta de vidrio.


Del escritorio,sacó un cuadernito forrado en tela escocesa roja con blanca,con un seguro,rebozando hojas y cartas. Me dijo que ése era su diario y que en él dejaba testimonio del abandono suyo de la niñez y de la bienvenida a la adolescencia. Le dije que yo hacía lo mismo y de un gritito,soltó su diario y me abrazó enérgicamente.


"Lo sabía! Lo sabía! Eres yo!"


sábado, 24 de febrero de 2007

Categoría de palabras

Debo confesar mi fascinación por el lenguaje, como también mi total torpeza ante él.

Para mi,una falta de ortografía es una falta de respeto, una violacion a la santidad de la palabra. Son también violaciones los garabatos y la mala redacción, aunque ésto sea mas bien una violación a la sintaxis.

... Hay una categoría gramatical que me consterna y sobrecoge : los adjetivos. Me fascina, es una pasión, encontrar el adjetivo apropiado para cada cosa en el mundo. Sentir la amplitud , la exactitud del adjetivo.Pero a la vez, cómo esperar que una simple palabra que sirve para describir un sustantivo, exprese lo que el hombre siente?

A veces siento que las experiencias son mayores que las palabras que existen para poder describirlas. Y esa impotencia, esa pequeñez, me exaspera. Es una crueldad contar con emociones mas no con palabras que las logren expresar. Es quedarse con cosas sin explorar, sin conocer, sin poder llorar, sin poder reir, sin poder pelear.

Pero por otro lado, para qué sirve un adjetivo? De qué nos sirve calificar cosas? Lo importante, lo fuerte, es el Verbo: sin verbo,no hay oración. El adjetivo no es más que challa, una mera distracción gramatical ante la realidad de la oración en si. Sin verbo, no hay oración. Sin verbo no hay oración. Se puede contar solo con verbo y sí, se dice que es una oración.
Entonces, estoy un tanto perdida. Pero es Mi verdad, mi camino: el adjetivo, el detalle, son cruciales para mi, tanto o más que un simple verbo que exprese acción. La acción es importante, pero no puedo ser tan fresca, tan Padre Gatica, de exigir acción cuando yo misma soy la inercia hecha mujer, a veces.

Y sólo digo a veces ...